La Unión Europea ha decidido no recomendar el control de fronteras ni la vacunación masiva como medidas principales para frenar la expansión de la nueva cepa de la viruela del mono (mpox). El Secretario de Estado de Sanidad de España, Javier Padilla, anunció recientemente la decisión de no llevar a cabo la vacunación del mpox y explicó que las autoridades europeas están enfocándose en estrategias alternativas para gestionar la situación.
En lugar de recurrir a medidas extremas como el cierre de fronteras o una campaña masiva de vacunación, las autoridades han optado por priorizar la vigilancia epidemiológica y la difusión de información precisa a la población. Según ha informado el Ministerio de Sanidad, estas acciones son consideradas más apropiadas dada la evaluación del “bajo riesgo” que la viruela del mono representa actualmente para la población europea en su conjunto.
El enfoque en la vigilancia epidemiológica implica un seguimiento constante de los casos y la identificación rápida de posibles brotes, permitiendo así a las autoridades sanitarias reaccionar de manera oportuna y eficaz. Por otro lado, la información a la población se considera crucial para garantizar que los ciudadanos estén al tanto de las medidas de precaución necesarias y para evitar la propagación del pánico o desinformación.
Cifras oficiales
Hasta el momento, las cifras oficiales indican que se han detectado solo cuatro casos de mpox en territorio español en los últimos diez días. Esto eleva el total de casos registrados en España en lo que va del año a 278. Aunque este número puede parecer significativo, es importante compararlo con las cifras del año anterior, cuando se alcanzaron 7,500 casos en total en el país.
Este contraste en los números demuestra un control más efectivo de la enfermedad en la actualidad, lo que respalda la decisión de no implementar medidas más drásticas como las mencionadas. Las autoridades seguirán monitoreando de cerca la evolución de la situación para garantizar la protección de la salud pública.
