La localidad de Villalbilla, en Madrid, vive momentos de gran tensión debido a las protestas de los vecinos en contra de un centro de MENAs (Menores Extranjeros No Acompañados), tras la denuncia de la violación de una niña de 14 años. La situación en el pueblo ha llegado a un punto crítico, ya que la tranquilidad habitual se ha visto alterada desde que estos menores fueron alojados en un chalet de la zona, hace apenas tres semanas.
La protesta, que surgió de manera espontánea, tuvo lugar frente al chalet donde residen ocho menores de origen magrebí. Los vecinos, preocupados y enfurecidos, se reunieron para expresar su descontento después de varios incidentes ocurridos en el pueblo. El detonante de esta movilización fue la denuncia de una presunta agresión sexual cometida por tres de estos menores contra una niña de 14 años, lo que generó una gran indignación en la comunidad.
Ocho MENAs acosaron verbalmente a un grupo de chicas
Además, se produjo otro altercado que agravó aún más la situación. En este incidente, ocho MENAs acosaron verbalmente a un grupo de chicas, también menores de edad. Este acto provocó la intervención de los padres de las niñas, lo que desencadenó un conflicto que terminó en un intercambio de golpes entre los adultos y los menores magrebíes.
La Guardia Civil ha intervenido en la situación y ha detenido al principal sospechoso de la agresión sexual, lo que ha generado una sensación de alivio parcial entre los vecinos. Sin embargo, la tensión sigue presente en Villalbilla, ya que los residentes temen que la presencia de estos menores siga afectando la paz y seguridad del pueblo.
La comunidad de Villalbilla, que hasta hace poco disfrutaba de una vida tranquila, ahora enfrenta un panorama incierto, marcado por el miedo y la desconfianza hacia estos menores. Las autoridades locales están bajo presión para resolver la situación y devolver la calma a los vecinos.
