La reacción internacional al anuncio de la victoria de Nicolás Maduro por parte del poder electoral controlado por el chavismo ha sido inmediata.
Estados Unidos, Argentina, Brasil y España han sido algunos de los países que han cuestionado los resultados electorales en Venezuela. El secretario de Estado de EE UU, Antony Blinken, pone en duda que el triunfo de Maduro refleje la voluntad de los venezolanos.
En cuanto a Brasil, esperó hasta la mañana de ayer lunes para opinar sobre los resultados. Y es que el Gobierno de Lula da Silva sigue muy de cerca el proceso del recuento. Y espera la publicación por parte del Consejo Nacional Electoral de los datos desglosados por mesa electoral.
El portavoz del Gobierno de Argentina, Manuel Adorni, manifestó que quiere condenar el fraude electoral perpetrado por el régimen del dictador Nicolás Maduro en la República Bolivariana de Venezuela.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, evitó felicitar a Maduro e insistió en la necesidad de asegurar la total transparencia del proceso electoral, incluyendo el conteo detallado de los votos y el acceso a las actas de votación de mesas electorales.
Y el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, también se pronunció para pedir total transparencia sobre el resultado de las elecciones.
Maduro rompe relaciones con Argentina, Chile, Costa Rica, Panamá, Perú, República Dominicana y Uruguay
Nueve países hispanoamericanos exigen a la Organización de Estados Americanos la «revisión completa de los resultados electorales». Mientras, Estados Unidos pospone la toma de decisiones sobre Venezuela.
Los Gobiernos de Uruguay, Argentina, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú y República Dominicana manifestaron en una declaración conjunta emitida este lunes su profunda preocupación por el desarrollo de las elecciones presidenciales en Venezuela.
En el comunicado, estos países subrayan la necesidad de la presencia de «observadores electorales independientes que aseguren el respeto de la voluntad del pueblo venezolano que participó masiva y pacíficamente» en los comicios.
La OEA ha accedido a la petición y ya ha convocado a una reunión extraordinaria mañana miércoles. Sin embargo, el organismo no se ha pronunciado de momento sobre los resultados en Venezuela.
Por su parte, Venezuela retirará al personal diplomático de sus misiones en Argentina, Chile, Costa Rica, Panamá, Perú, República Dominicana y Uruguay, “en rechazo ante las injerencistas acciones y declaraciones” de sus gobiernos, luego de que la autoridad electoral proclamará la reelección del presidente Nicolás Maduro.