La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha implicado a Ion Antolín, jefe de prensa del PSOE y recién nombrado secretario de Estado de Comunicación, en el caso en contra de García Ortiz por la filtración del correo electrónico del novio de Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador.
Según la investigación, la Guardia Civil ha determinado que Antolín formaba parte del reducido grupo de personas que conocía el contenido del correo antes de su publicación en los medios.
Las conclusiones de la UCO se basan, entre otros indicios, en las declaraciones que señalan que el exlíder del PSOE en Madrid, Juan Lobato, compartió con el director del gabinete del grupo parlamentario socialista en la Asamblea de Madrid su preocupación por las órdenes recibidas desde Moncloa para manejar el correo original antes de su filtración. «No puede ser», llegó a expresar Lobato en referencia a dichas instrucciones.
En esa conversación, su interlocutor mencionó que Ion Antolín, desde la sede del PSOE en Ferraz, también le había escrito para transmitirle la misma directriz.
La UCO descubre un borrado intencionado de los mensajes del móvil del fiscal general, Álvaro García Ortiz
La Unidad Central Operativa (UCO) ha entregado un informe al Tribunal Supremo en el que certifica la eliminación del contenido de los teléfonos de Álvaro García Ortiz durante un periodo clave relacionado con la investigación por una presunta revelación de secretos.
El documento señala que no se han encontrado «mensajes pertenecientes a ninguna aplicación de mensajería instantánea» entre el 8 y el 14 de marzo, las fechas más críticas en relación con la supuesta filtración.
La posible eliminación de mensajes de WhatsApp, SMS y otras conversaciones complica la situación de García Ortiz. El juez Ángel Hurtado investiga si el fiscal pudo haber remitido a diversos medios de comunicación documentos reservados en los que Alberto González Amador negociaba un acuerdo de conformidad y se ofrecía a asumir la comisión de dos delitos fiscales.
Llama la atención que, durante el registro y análisis de los dispositivos de la fiscal jefa provincial de Madrid, se detectaron mensajes enviados por el máximo responsable de la Fiscalía que ahora no figuran en el análisis de sus propios dispositivos.