Ábalos descarga la responsabilidad en Koldo García

Comenzamos con la información de este viernes comentando las declaraciones del exministro de Transportes, José Luis Ábalos, en su comparecencia ante el Tribunal Supremo en el marco de las investigaciones en su contra por la compra de mascarillas durante la pandemia.

En su declaración, Ábalos evitó hacer alusiones a los miembros del Gobierno, lo que podría responder a un acercamiento con su antiguo partido. El exdirigente socialista afirmó que nunca cobró comisiones ni adjudicó contratos a empresas concretas

Aseguró que la búsqueda de mascarillas al inicio de la pandemia la delegó en Koldo García, que mantenía «una relación estrecha» con Víctor de Aldama

Sin embargo, a pesar de eso, el abogado de Koldo evitó formularle preguntas durante las más de tres horas de interrogatorio, lo que ha levantado suspicacias.

Según informa hoy The Objective, las partes sospechan que hay un acuerdo entre Ábalos y Koldo para que sea Koldo quien asuma la responsabilidad de las mascarillas.

Koldo respalda a Ábalos y acepta la responsabilidad:

El principal damnificado de la declaración del exministro José Luis Ábalos en el Tribunal Supremo ha sido su ex asesor principal, Koldo García.

Ábalos le responsabilizó ante el juez de una buena parte de los hechos de los que se le acusa, como la relación con el empresario Víctor de Aldama, los pagos del alquiler de un piso a su novia, o la contratación de esta joven para un puesto en la estructura del Ministerio de Transportes.  

Sin embargo, Koldo no tiene la misma impresión. El ex asesor de Ábalos comentó a El Confidencial que él no lo ve como una traición y que José Luis Ábalos ha dicho la verdad. 

Asegura que “Ábalos no le ha culpado de todo” y que “ha estado hablando con sus abogados y la percepción que tienen es la misma”. Koldo afirma estar tranquilo y confirma que: “Es verdad que él se encargaba de los alquileres y de supervisar el material sanitario” pero recuerda que Ábalos también ha dicho que él no tenía ningún tipo de poder para firmar contratos o destinar un euro de la administración a nadie.